sábado, 18 de julio de 2009

De incierto a real


Dicen que la distancia es un gran impedimento, un obstáculo, un inconveniente. Tener lejos a tus amigos, a la persona que amas, a tu familia es difícil. Tratar de mantenerte lo más cerca posible a través del celular, el msn, viendo las fotos del facebook, recordando tantas cosas juntos.

Pues sí, yo era de las personas que creían que las relaciones a distancia no funcionan. Las amistades sí, las relaciones no.

Como me comentaban algunas personas con las que converse sobre el tema, la fidelidad es el gran factor de miedo. ¿Cómo le vas a ser fiel a tu enamorado si esta tan lejos? … ¿podrás resistir las tentaciones? … podría poner una lista de mil preguntas parecidas.

El otro factor era la confianza. ¿Cómo sabes que no te oculta algo?, ¿Quién te asegura que no tiene otra flaca allá? (créanme que mis amigos tenían unas alucinaciones buenazas, al principio me enojaba, pero después me di cuenta que solo se preocupaban por mí y no querían que nada ni nadie me hiciera sufrir)

Con todo y todo a veces uno se arriesga, a veces uno pone en una balanza sus sentimientos y la razón, a veces aunque todo sea incierto, vale la pena intentarlo.
Y sí, después de algunos meses, 8 para ser exacta me doy cuenta que lo que parecía imposible, ahora es real.

Real porque dependes de eso, real porque no te imaginas tu vida sin esa persona, real porque él es parte de ti y tú eres parte de él.

Y es así como siento las cosas ahora, y es así como quiero seguir.

Una relación así solo tiene dos opciones: O aprendes a valorar a la persona y extrañarlo te hace quererlo más, o el tenerlo lejos hace que los sentimientos cambien.
En mi caso, el tenerlo lejos, hace que lo extrañe más, que cuente los días para verlo de nuevo, que recuerde con una sonrisa cada momento que pasamos juntos, por más pequeño que fuera.

Con todo y todo soy feliz, como hace mucho tiempo no lo era. Y sí, las relaciones a distancia son poco recomendables, pero saben, arriesgarse a veces trae su recompensa, si esa persona lo vale, uno debe poner de su parte y salir adelante juntos.

Felices ocho meses… gracias por soportarme y por hacer de las cosas más simples, como estar escuchando música sentados en mi mueble, un momento inolvidable y especial. Te amo.


1 comentario:

Sebastian Ortiz Martínez dijo...

La pinche distancia, toda una prueba. Pero mientras ambos confiemos el uno en el otro todo ira bien.

Hay momentos en que los dos nos ponemos medios cojudos y 'emos', pero estas situaciones son normales en el tipo de relación que llevamos.

Aprender a saberlas llevar es lo debemos aprender. A ser tolerantes entre nosotros. Cuando estamos demasiado alegres, tristes, jodidos y extrañarnos más que nunca, contando los días y horas para vernos.

Trepándonos en un bus y comernos 20horas y mil 290 kilómetros (que se te borre la raya) estas son los pequeños detalles, que quizás, para otros no importen pero para nosotros sí.

No tengas miedo S porque si las cosas cambian serán para bien.

No tengas miedo porque te amo y siempre será así.

No tengas miedo porque tenerte lejos hace que te quiera aún más.

No tengas miedo porque pronto los dos viviremos en una misma ciudad, sea Tacna o Lima, tal vez Moquegua no? ja ja.

Te amo